lunes, 20 de abril de 2020

CORDERO ASADO AL HORNO EN BOLSA


Existen muchas maneras tradicionales de hacer el cordero dependiendo de la zona geográfica y todas ellas exquisitas: Guisado a la manera de Galicia, Asturias y Cantabria; en chilidrón como le gusta a los Vasco-Navarros, en caldereta  al modo extremeño y andaluz o con un toque mediterráneo con miel y almendras y romero;  y ¡cómo no! el  tradicional y afamado asado al horno de Castilla elaborado con cordero lechal con agua y sal.

Hoy os queremos presentar una manera diferente, práctica y limpia de hacer el cordero en casa. Se trata de asarlo al horno en una bolsa de hornear con lo que retendremos todo el sabor de la carne y los jugos del asado  además de permitirnos prolongar mas las cocciones si las queremos hacer a baja temperatura con unos resultados sorprendentes.

En la receta de hoy, dado que nuestra pierna era grandecita, hemos preferido  asarlo al principio algo mas lento de lo debido para que nos quedara tierno y jugoso por dentro. Si fuera un pieza de lechal reduciríamos el tiempo empleando una  hora y veinte aproximadamente a 160/170  grados y otra media hora a 190/200 grados dependiendo del horno.

Ingredientes:

1 pierna de cordero recental (1,5 kg aproximadamente)
Agua
Vino blanco
Vinagre
Brandy
AOVE (Aceite de Oliva Virgen Extra)
1 limón
3 dientes de ajo
Romero
Tomillo
Sal

Elaboración:

Ponemos la noche anterior a marinar, en un bol grande o bolsa, nuestra pierna de cordero. Cortaremos los dientes de ajo, en dos o tres trozos.  Masajeamos con la sal, el aceite, las hierbas (tomillo y romero) la carne del cordero. Regamos la pierna con un buen chorro de brandy, otro de vino blanco y medio limón exprimido. A la mañana siguiente antes de cocinar le damos la vuelta para que se empape, otro poco, de jugos y aromas por el otro lado.

Proseguimos sacando el cordero del líquido de marinar que tiraremos. Volvemos a salar un poco mas el cordero, untándolo  de nuevo con aceite y las hierbas . Lo introducimos en la bolsa a la que añadimos un chorro de vinagre, otro generoso de vino blanco y un poco de agua (Un medio vaso). Cerramos la bolsa, la depositamos en una fuente y la introducimos en el horno previamente precalentado.

Dado que nuestra pierna era grande lo tendremos unas cinco horas al horno. Primero dos horas y media   a 90 grados con ventilador y calor arriba y abajo. Luego otra  hora y media   a 150 grados, finalizando durante una hora a 190/200 grados (Con la bolsa no se debe superar esa temperatura ).

 A mitad de cada fase de temperatura le daremos, con cuidado de no quemarnos, la vuelta a la bolsa para que se haga bien por todos los lados. Finalizamos, si no nos ha quedado bien rustida la piel, retirando el cordero y el líquido(que reservaremos) de bolsa y gratinando la piel durante unos minutos para que nos quede con ese toque crujiente que tanto nos gusta.

Salud Cofrades y buen apetito.


miércoles, 8 de abril de 2020

CROQUETAS DE COMPANGO DE FABADA ASTURIANA



Las croquetas vuelven a estar de moda. Desaparecidas de las cartas de los restaurantes han vuelto con fuerza, desde hace unos años, a las mismas ocupando un lugar destacado de su oferta culinaria.

De donde nunca se fueron ha sido de las casas,  pasando la tradicional receta de la abuela a  madres e hijas.

El secreto de una buena croqueta es su cremosidad e intenso sabor por dentro y  bien crujientes por fuera.

 Para lo primero es preciso conseguir una buena bechamel con un buen relleno, para lo segundo crear una capa  crujiente con un tiple rebozado a base de harina, huevo y pan rallado.

Existen mucho tipos  de relleno siendo las mas frecuente las de jamón, pollo o bacalao. Hoy haremos una receta de aprovechamiento en éste caso utilizando  las chacinas (compango) de la Fabada que resultaran deliciosas.


Ingredientes:

Para la Bechamel:

100 g de mantequilla
  50 cl de Aceite de Oliva de 0’4
500 cl leche entera
250 cl Nata liquida
250 cl de caldo de fabada o de la cocción del embutido (Bien desengrasado)
120 g harina de trigo
 30 g de maicena
Sal

Para el relleno:

1 chorizo (sin piel)
1/2 morcilla ( sin piel)
100 g de lacón cocido

Para el rebozado:

Harina
Huevos
Pan rallado


Elaboración:

Comenzamos quitando la piel al chorizo y la morcilla y lo introducimos junto con el lacón en una batidora para triturarlo bien. Lo reservamos en la batidora

Proseguimos añadiendo el aceite en una cazuela al fuego o sartén amplia. Añadimos la mantequilla y la fundimos. A continuación ponemos la harina y la maicena  y haremos un roux  mezclándolas bien con la grasa fundida. La tostamos un poco sin parar de remover. 

Vertemos la ahora mitad de la leche y la nata, que habremos templado, y vamos revolviendo con la ayuda de unas varillas para que se vayan deshaciendo los grumos. Dejamos cocer, sin parar de remover, unos 15/20 minutos aproximadamente. Entretanto vamos añadiendo segun vayamos necesitando el resto de la leche y el caldo de la fabada (desengrasado). Pasado ese tiempo añadimos la bechamel a la batidora para integrar en la bechamel el compango. 

Batimos un poco  y lo volvemos a poner   en la cazuela de nuevo. Cocemos a fuego medio unos diez minutos mas añadiendo el resto de la leche si nos quedara y   removiendo con las varillas hasta obtener la densidad deseada. Probamos de sal y rectificamos si fuera necesario.

Continuamos vertiendo la bechamel en una tartera o fuente. Cubrimos con papel film a ras(para que no se forme costra) y la ponemos a enfriar durante varias horas en el frigorífico.

A la hora de hacer nuestras croquetas, las sacamos del frigorífico para darles forma. Para ello o bien nos servimos de dos cucharas para hacer una quenelle dándole una forma ovalada o utilizamos las manos, previamente enharinadas, para darles forma (todas del mismo tamaño) . Luego las pasamos por harina, huevo batido y finalizamos rebozandolas bien en pan rallado.

Sera el momento de ponerlas a freír en abundante aceite bien caliente. Les damos vueltas para que se sellen por todos los lados y no se rompan. Acabamos retirándolas a un plato con papel absorbente para que chupen el exceso de aceite y no nos queden grasientas.

Ricas y melosas…


¡Salud Cofrades y buen apetito!

martes, 7 de abril de 2020

PANADES MALLORQUINAS DE SEMANA SANTA


Mallorca es tierra de tradiciones. Una de ellas son sus Empanadas. Hoy os traemos una receta muy típica de la isla siendo costumbre elaborarla, durante la  Semana Santa, en compañía de la familia o con los amigos. 

 En esta ocasión nuestros amigos Maria y Toni, de Andratx, han querido compartir con nosotros la receta que os presentamos.

Ideales para un tentempié o aperitivo.

Ingredientes(Para 8 personas):

1 kg de carne de cordero (mejor pierna deshuesada)
200 g de panceta o tocino de cerdo
Pimentón dulce (opcional para el adobo)
200 g Guisantes
100 g de alcachofas troceadas ( opcional)
Sobrasada  mallorquina (al gusto)
Sofrito o cebolletas (opcional)
1 kg de harina floja
1 vaso de agua o leche
1 vaso de zumo de naranja (se puede sustituir por agua)
1 vaso de aceite de oliva suave (0,4)
250 g manteca de cerdo
Sal
100 g de azúcar (si se hacen con masa dulce )
3 yemas de huevo
1 limón

Elaboración:

Antes de nuestra elaboración hemos tenido durante una hora aproximadamente,  en adobo ligero , nuestro cordero y el cerdo (le dará untuosidad y grasa al relleno), los trozos de alcachofa finamente troceados, con un poco de limón, sal y pimienta.(Se puede poner si se quiere un poquito de pimentón dulce)

Escurrimos el líquido que haya soltado y ponemos en un bol las carnes troceadas, añadimos los guisantes(si fueran congelados los atemperamos previamente) y un poco de “sofrito” bien  picado. Salpimentamos, mezclamos bien y  reservamos.

Nos ponemos  ahora con la masa incorporando en otro bol la manteca de cerdo, el aceite de oliva, las yemas de huevo y el resto de líquidos. Añadimos el azúcar, si las queremos ligeramente  dulces, y la harina. Nos ponemos a continuación unos guantes  y vamos amasando con la punta de los dedos hasta ligar bien todos los ingredientes.

Una vez que la masa tiene consistencia y no se pega a las manos, la sacamos del bol y continuamos amasando ligeramente sobre la mesa  espolvoreada con un poco de harina para evitar se pegue al trabajarla(No debemos amasar demasiado). Dejamos reposar tapado con papel film  unos 15/20 minutos.

Hecha la masa hacemos unas tartaletas o cazoletas con ella. Para lo cual cogemos un trozo de masa (Unos 80 gramos para cada una) para la cazoleta y otros 30 g para la tapa.

Vamos moldeando con los dedos, como si fuéramos unos alfareros,  hasta hacer  unas cazoletas de unos doce o quince centímetros de diámetro, mas o menos, que rellenamos con las carnes y verduras que hemos reservado. Añadimos una pizca de sobrasada y cerramos con una tapa que habremos hecho con los otros 50 g de masa.  

Las unimos por los bordes para sellar bien la tapa y le hacemos unos pliegues a modo de adorno con los dedos. Pinchamos la tapa con un tenedor para que pueda salir el aire al hornearlas . Y así con las restantes  empanadas (Nos saldrán con estas cantidades alrededor de una docena).

Finalizamos introduciéndolas en el horno, precalentado a 180 grados, y horneando unos 40/50 minutos, según el horno, vigilando no se quemen.


¡¡Salut confrares i bon apetit!!

domingo, 5 de abril de 2020

ESPAGUETIS CON NAVAJAS A LA SARTEN Y AJETES TIERNOS


Continuamos hoy con otra receta de pasta. En este ocasión la haremos con navajas y espaguetis aunque la podríamos hacer perfectamente con almejas emulando a la clásica receta italiana de Spaguettis alle Vongole , la cual se puede hacer añadiendo tomate o sin él, “in bianco”, como la haremos hoy.

Hemos preferido utilizar las navajas en lugar de las almejas, además de ser mucho mas económico, para reivindicar este molusco, utilizado muchas veces como cebo, y que bien tratado alcanza altas cotas gastronómicas por su delicioso e intenso sabor a mar.

Para que brille este marisco  en todo su esplendor es importante, primero limpiarlo bien de impurezas y arena y luego no pasarse de cocción para que y no “encalle” y se acorche.

En cuanto a los espaguetis es aconsejable hacer una cocción corta para dejarlos al dente ya que después los rehogaremos en la salsa. Podemos cocerlos simplemente en agua aunque en ésta ocasión para darle mayor sabor y realce a nuestro plato utilizaremos caldo de pescado que podemos aprovechar para otras preparaciones.

Ingredientes(Para 6 pax):

0,5 kg de espaguetis
0,750 g de navajas
3 dientes de ajo
8 ajetes
1 copa de vino blanco seco
3 cayenas
Perejil
3 l de caldo de pescado


Elaboración:

Tres o cuatro horas antes de prepararlas las ponemos en un vaso alto (Utilizaremos tres vasos para esta cantidad) con agua y sal de manera vertical, como si fueran bolígrafos, con la parte de la carne hacia arriba para que por decantación vayan soltando la arena. Cambiamos de agua varias veces. A la hora de sacarlas las lavamos con agua bajo el grifo y las apretamos por el centro para que acaben de soltar la arena.

A continuación las abrimos en una sartén al fuego con unas gotas del aceite. Retiramos la carne de las conchas y las partimos a la mitad para que podamos comerlas mejor. Será en éste momento cuando retiraremos el estomago (Una especie de bolsa negruzca) para eliminar cualquier resto de arena o desecho.

Proseguimos cociendo los espaguetis en el caldo de pescado (unos siete u ocho minutos una vez que comience la ebullición), añadimos un poco de aceite y removemos para que nos quede suelta la pasta y no se apelmace. Pasado este tiempo  sacamos y dejamos escurrir la pasta. Reservamos el caldo para otro plato.

Ahora haremos nuestra salsa para lo cual limpiamos y partimos en trozos menudos nuestros ajetes y los pasamos a la sartén con aceite y guindilla. Añadimos también los dientes de ajo picados. Cuando estén dorados incorporamos la copa de vino blanco y dejamos se evapore durante minuto y medio aproximadamente. Sera ahora cuando ponemos las navajas, los espaguetis añadiendo un poco del caldo y perejil. Removemos bien y dejamos dos o tres minutos para que se haga del todo la pasta y vaya absorbiendo los sabores de nuestra salsa.

Listo y a la mesa.¡ Receta sabrosa  y diferente!


¡Salud Cofrades y buen apetito!

jueves, 2 de abril de 2020

PENNE AL AJILLO CON ALCACHOFAS


Receta sencilla y resultona. Una variación de la clásica receta italiana de “Pasta con aglio, oglio y pepperoni”. 

En este caso hemos elegido para prepararla los “Penne” (Plumas en Italiano) acompañados de unas deliciosas y saludables alcachofas. Los Penne son muy parecidos a los macarrones aunque se diferencian de estos en que son algo mas estrechos y están cortados en sus extremos de forma oblicua.

Dependiendo si estamos o no en temporada podemos utilizar alcachofas frescas o congeladas

Ingredientes(para 6pax):

250 g de Pasta (Penne o macarrones)
350 g. de Alcachofas troceadas
Taquitos de jamón serrano
3 dientes de ajo
AOVE
2 guindillas o cayenas
Perejil
Queso rallado o lascas de parmesano
Pimienta negra
Sal

Elaboración:

Utilizamos alcachofas congeladas. En esta ocasión corazones de alcachofas que podremos a hervir con agua con sal y un chorrito de aceite junto con la pasta (así se impregnará del sabor a alcachofa). Lo dejamos al fuego unos diez minutos contados a partir que comience la ebullición. Cuando esté listo retiramos del fuego; los sacamos de la cazuela y dejamos escurrir.

Entre tanto hemos cortado los dientes de ajo en láminas y los ponemos a dorar en una sartén con aceite y dos guindillas. Cuando estén casi dorados añadimos al aceite unos taquitos de jamón y las alcachofas con la pasta. Rehogamos todo bien e incorporamos perejil  picado; salpimentamos  finalizando con un poco de queso rallado o lascas de parmesano por encima.


Troppo buono…¡Buon appetito!

CARNE GUISADA



Un plato que no puede faltar en ningún hogar, elaborado con ligeras variaciones según la Región. En unos lugares, como Andalucía, la hacen con tomate; en el País Vasco le ponen ademas de tomate, choriceros y guisantes  con abundante zanahoria o  otros la guisan simplemente con una salsa a base de ajo, cebolla y vino blanco. 

Tambien es importante elegir la carne más adecuada para que nuestra receta quede bien tierna y melosa, sin olvidarnos de ponerla a marinar con hierbas aromáticas y algún licor para que se ablande y se impregne de aromas.

Particularmente resulta apropiada para guisar, el morcillo (jarrete, chamón o zancarrón ) o la carne de ahuja. Últimamente tambien se han puesto de moda por su textura las carrilleras, bien de vacuno o ibéricas. La Aleta es ideal para hacerla rellena y enrollada.

 En ésta ocasión utilizaremos el morcillo (las pantorrillas), carne muy magra y jugosa


Ingredientes: (6 pax):

1,5 kg de morcillo o zancarrón
2 zanahorias
1 cebolla
1 pimiento italiano
½ pimiento rojo
4 dientes de ajo
¼ de puerro
125 g. de guisantes
1 vaso de vino blanco seco
1 vaso de brandy
Especias (tomillo, romero y orégano)
1 cucharada de pimentón dulce
Pimienta negra
Sal
Agua  o caldo de carne
AOVE

Elaboración:

Pedimos nos corten en la carnicería en  trozos grandes nuestro morcillo.  Antes de ponernos a cocinarlo retiramos el exceso de grasa y nervios que tuvieran los trozos y los ponemos a marinar unas 6/8 horas con tres dientes de ajo troceados, las especias (tomillo, romero y orégano) y la copa de brandy.

Pasado éste tiempo, retiramos los trozos de la carne y los secamos. Tiramos el líquido del marinado.  A continuación ponemos en la olla a presión un poco de aceite y ajo cuando esté caliente vamos introduciendo los trozos de la carne para dorarlos por todos los lados. Según se van haciendo los retiramos, salamos y reservamos.

En el mismo aceite donde hemos dorado la carne sofreímos las verduras que previamente habremos cortado toscamente, para darle un aire rustico a nuestra carne guisada, levantando los jugos de la carne que hayan quedado en el fondo de la olla.

Una vez listo el sofrito añadimos la carne, la cucharada de pimentón, la pimienta, revolvemos y vertemos la copa de vino blanco; dejamos se evapore un poco y finalizamos añadiendo dos vasos de agua (También podríamos utilizar caldo de carne).

Cerramos la olla y dejamos que este cociendo el guiso unos  veinticinco o treinta  minutos. Pasado este tiempo abrimos la olla y añadimos los guisantes y dejamos que prosiga la cocción a fuego lento otros quince minutos mas. Corregimos de sal y añadimos agua si fuera necesario. Si quisiéramos la salsa un poco mas consistente y espesa diluiremos en caliente una cucharada de maicena.

Mejor prepararla el día anterior y dejar que el guiso se asiente y se concentren los sabores.

A la hora de servir el plato acompañaremos con unas  patatas que hemos cortamos en trozos menudos y  frito. Otra opción que le va muy bien  a nuestro guiso sería servirla con un puré de patata que haremos  añadiendo a la patata abundante mantequilla y leche entera para que quede cremoso y bien espeso.

Salud Cofrades y a disfrutar de este sencillo y suculento plato.